Desde hace semanas, estudiantes de diferentes universidades del mundo protagonizan protestas en contra del genocidio en la Franja de Gaza. Casi paradójicamente, el principal epicentro de disputa está en Estados Unidos. Con carpas, tomas y sentadas, exigen al gobierno de Joe Biden que deje de financiar la guerra. Esto tiene como resultado la detención de 120 estudiantes la noche del lunes en Nueva York. Además de otros 100 detenidos de la Universidad de Columbia. Y otras 50 más en la Universidad del Sur de California. Denuncian que Israel ya asesinó más de 34mil palestinos. Según UNICEF, asesinan un niño cada diez minutos.
Esto se vio reflejado en toda la sociedad estadounidense. Por ejemplo, durante el bloqueo del puente Golden Gate en San Francisco, los manifestantes que detuvieron el tránsito reclamaban que se “pare el mundo por Gaza”.
El mundo entero rechaza el genocidio
Las manifestaciones convocadas por la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina (Rescop) en Madrid, exigió al Gobierno de Pedro Sánchez el fin del comercio de armas y relaciones con Israel. Además de la libertad de las “más de 7.000 personas detenidas de manera irregular por el Gobierno de Netanyahu”.
En París, cerca de 2mil personas reclamaron “contra el racismo, la islamofobia y la violencia contra los niños”. También en Italia, los estudiantes de la Università Sapienza de Roma protagonizaron una huelga de hambre. Además, exigen la suspensión de los acuerdos de cooperación del gobierno italiano de la ultraderechista Giorgia Meloni con Israel.
Del mismo modo, durante el mes de Ramadán, países islámicos como Bangladesh, Pakistán, Irak, Jordania, Yemen, Indonesia, Baréin, Líbano, entre otros, miles de personas se manifestaron en apoyo a Palestina. “En más de dos mil ciudades y aldeas de la República Islámica de Irán el respaldo a la libertad palestina se hizo sentir con fuerza, miles denunciaron la escalada y pidieron el apoyo internacional, las marchas coincidieron con la llegada de los cuerpos de las víctimas del ataque israelí a la embajada iraní en Damasco”.
Las hostilidades en Medio Oriente ponen en vilo al mundo entero
Incluso en el mismo Israel, en su capital Tel-Aviv, decenas de miles de manifestantes han salido a las calles exigiendo la dimisión de su primer ministro y principal responsable del genocidio, Benjamín Netanyahu.
🔴 #AHORA | En Tel Aviv, Israel, miles de personas piden la renuncia de Benjamín Netanyahu. La situación en Gaza, los rehenes y el previo desgaste del gobierno antes del conflicto con Hamás por la reforma judicial han desgastado al ejecutivo israelí. pic.twitter.com/9q7kafMq0r
— Mundo en Conflicto 🌎 (@MundoEConflicto) April 20, 2024
Bancar a Israel: una tarea cada vez más difícil
El Consejo de Seguridad de la ONU recientemente rechazó el ingreso de Palestina como país miembro del organismo. Por supuesto, con el auspicio del veto de Estados Unidos. Algunos países del G7-que representan el 55 % del PBI mundial-, contribuyen de forma directa e indirecta con armamento, logística, apoyo político y económico, a la masacre del pueblo palestino.
Cabe recordar que, incluso antes de la última escalada del conflicto en octubre del año pasado, la ONU y distintas organizaciones internacionales consideraban que la Franja de Gaza se encontraba bajo un dominio directo e indirecto de Israel. Ya que es el Estado sionista el que controla el espacio aéreo y marítimo, los pasos fronterizos, así como también los servicios de agua potable, electricidad y telecomunicaciones. Aunque en términos políticos y administrativos, desde el año 2006, se encuentra en el poder el grupo islamista Hamás.
Crisis humanitaria
A los muertos en manos de bombardeos y hambruna, se suman 76mil heridos y aproximadamente 2 millones de personas desplazadas.
Ya en febrero de este año, Ted Chaiban, un alto ejecutivo de UNICEF, alertaba que “la población de la Franja de Gaza está a punto de asistir a una explosión de muertes infantiles prevenibles, que ya de por sí habían alcanzado niveles insoportables”. Y agregaba: “Llevamos semanas advirtiendo de que la Franja de Gaza está al borde de una crisis nutricional. Si el conflicto no termina de inmediato, la situación nutricional de la infancia seguirá deteriorándose; esto traerá consigo muertes prevenibles o problemas de salud que afectarán de por vida a los niños y las niñas de Gaza, y las consecuencias podrán durar generaciones”.
En ese momento, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimaba que el 90% de los niños y niñas menores de dos años y el 95% de las mujeres embarazadas y lactantes se encontraban sufriendo una pobreza alimentaria grave. Esto significa que han consumido dos o menos grupos de alimentos el día. Además, que el valor nutricional de los alimentos que consumen es extremadamente bajo.
No obstante, los bombardeos y ataques por cielo, mar y tierra continuaron de forma indiscriminada. El 6 de abril pasado, una misión interinstitucional dirigida por la OMS declaraba tras haber accedido al hospital Al Shifa: “Al igual que la mayor parte de la zona norte, el hospital Al-Shifa, que en su día fue el mayor y más importante hospital de referencia de Gaza, es ahora un armazón vacío tras el último asedio. No quedan pacientes en el establecimiento”.
