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    Marcha de la CGT, la resistencia y la necesidad de un paro general

    La CGT se movilizará a Tribunales este miércoles a las 12 del mediodía y hará una presentación judicial para pedir la inconstitucionalidad del DNU. Las dos CTA, los movimientos sociales nucleados en la UTEP y la izquierda se sumarán a la medida.

    El decretazo de Milei está escrito para los dueños del país

    La movilización a Tribunales será una parada fundamental para todos los que quieren frenar el DNU del Gobierno. Se espera que la convocatoria de cientos de miles de personas genere un debate social sobre las consecuencias del megadecreto y la metodología antidemocrática del Gobierno.

    La CGT sale en defensa de su caja y presionada por los cacerolazos

    Luego de la cadena nacional en la que el presidente, Javier Milei, anunció el DNU, los máximos dirigentes de la CGT manifestaron rápidamente su oposición. Héctor Daer, Pablo Moyano y otros popes sindicales explicaron los ataques contenidos en los diferentes artículos del megadecreto que profundizan la precarización del trabajo, limitan fuertemente el derecho a huelga y fomentan el aumento de los empleos temporarios. 

    La movilización a Tribunales será una parada fundamental para todos los que quieren frenar el DNU del Gobierno.

    Previo al anuncio del decreto y los masivos cacerolazos que se desplegaron a lo largo y acho del país, la cúpula cegetista tenía pactada una reunión con el ministro del Interior, Guillermo Francos, quién había pasado una serie de acuerdos con los dirigentes sindicales. Según trascendidos, la gota que rebalsó el vaso de la paciencia de los sindicalistas fue la modificación dispuesta por el Gobierno Nacional sobre las obras sociales sindicales. De ahora en más los afiliados a sindicatos no tendrán la obligación de cotizar en una obra social y podrán elegir aportar en una prepaga que obviamente va a tener una mayor estructura de marketing.

    En las plazas, las esquinas y las calles, la gente cantaba: “A dónde está que no se ve, esa traidora CGT”.

    A esto se suma, que según la estimación de los expertos, para febrero del 2024, entre transporte y contribución, el aporte mínimo de cobertura ascenderá a los $5.447, por lo que las obras sociales estar obligadas a dar cobertura a todo el grupo familiar, mientras que las prepagas no tendrán esta obligación.

    Además, la reacción popular puso presión a la CGT para que tome alguna medida contra el DNU. En las plazas, las esquinas y las calles, la gente cantaba: “A dónde está que no se ve, esa traidora CGT”. Este reclamo se viralizó y las redes se llenaron de memes mofándose de la central por su inacción y pasividad.

    La discusión dentro de la dirigencia cegetista

    Por esta combinación de factores, finalmente los dirigentes convocaron a una reunión. Luego de horas de discusión, las diferentes sensibilidades de la Confederación General del Trabajo sintetizaron posiciones y dieron a conocer cuales son los siguientes pasos de acción. 

    Resumiendo la polémica que tuvieron los 50 dirigentes que participaron del encuentro, Nicolás Balinotti publicó en La Nación una nota que explicaba que había dos perspectivas divergentes. De un lado, los sindicatos más propensos al diálogo, liderados por el grupo conocido como “los Gordos” y los autodenominados “independientes”, quienes abogaron por “la prudencia”, sugiriendo esperar las decisiones del Congreso o la Justicia en relación con el megadecreto oficialista. Por otro lado, la postura opuesta fue encabezada por los sindicatos con posiciones más confrontativas encabezados por Pablo Moyano de Camioneros, quienes se inclinaron por una acción más contundente mediante una medida de fuerza programada para la semana que viene. 

    Los trabajadores necesitamos nuestro partido

    Omar Plaini, secretario general del gremio de Los Canillitas visitó el programa de Jorge Fontevecchia en Radio Perfil y describió pormenorizadamente los siguientes pasos de la CGT: “Nosotros, obviamente, vamos a impugnar el DNU. Para nosotros es inconstitucional, porque invade la competencia del Congreso afectando la división de poderes y el funcionamiento de la república, la democracia argentina”.

    “Para ello, el próximo miércoles haremos una presentación en Tribunales donde pediremos la inconstitucionalidad del DNU. Eso lo vamos a hacer acompañado de una movilización. El día jueves, de acuerdo a lo que dice nuestro estatuto y los cuerpos orgánicos, vamos a realizar el Comité Central Confederal, que es un órgano deliberativo que faculta el Consejo Directivo Nacional y a las más de 100 regionales que tenemos a lo largo del país, para establecer el inicio de un plan de lucha, que luego decidirá el Confederal en qué modo, con movilizaciones y distintas acciones, o alguna acción directa, según lo defina el Comité Central Confederal”, indicó.

    Las dos CTA se sumarán a la movilización 

    Los dirigentes de las dos vertientes de la Central de Trabajadores Argentinos expresaron que este espacio se sumará a la convocatoria de la CGT “contra el DNU de Javier Milei”  y manifestaron que al día siguiente definirán fecha de “un paro general con movilización en todo el país”. 

    Consultado sobre las amenazas de Patricia Bullrich de aplicar el protocolo antipiquete, el dirigente histórico docente y actual secretario general de la CTA de los trabajadores, Hugo Yasky, expresó: “no nos van a amedrentar con la represión ni con las fuerzas de seguridad. Este pueblo sufrió una dictadura y salió adelante; la clase trabajadora tiene 30 mil desaparecidos. No nos amedrentan”.

    “En la Casa Rosada hay un grupo de gente que piensa que, en lugar de iniciarse el mandato de un presidente, se inició el reinado de las fuerzas del cielo. No estamos ante una monarquía. El Congreso existe y tiene tanta validez como el presidente”, ironizó Yasky.

    Los principales gremios  de esta central son los docentes y estatales, que se ven profundamente afectados por la llamada “política motosierra” de Javier Milei de achique fiscal que pretende seguir haciendo sobre salud y educación, además de la terrible licuadora de Caputo que pulverizó las asignaciones a educación y disminuyó aún más sus decrecidos recursos. Además, como a cualquier organización gremial la golpea los artículos del DNU que cercenan el derecho a huelga. 

    Los movimientos sociales y la economía popular en pie de guerra 

    En un posteo de la red X titulado “Se amplía la unidad de las organizaciones para frenar el DNU”, la cuenta de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), señaló: “En medio de una crisis social agudizada por las medidas del gobierno, decidimos poner en común ideas y acciones. El hambre y la pobreza se multiplican en los barrios más humildes y en la mayoría de las familias trabajadoras”.

    “Es por eso que este miércoles 27 nos sumamos a las movilizaciones en defensa de nuestros derechos y la soberanía nacional”, indicaron.

    La izquierda se suma para “exigirle a la CGT un paro general” 

    Los diferentes partidos que componen la izquierda revolucionaria tiene una visión común: los trabajadores necesitan un paro general para frenar el DNU de Milei. Del otro lado, dirigentes sindicales peronistas le responden que todavía amplios sectores de la clase obrera siguen apoyando a Milei y una oposición tan directa haría quedar a las centrales sindicales como antidemocráticas.

    Esta polémica es crucial a la hora de encarar la resistencia al gobierno de Javier Milei y sus medidas. Si se espera que los trabajadores sientan las consecuencias del DNU, implica que las organizaciones gremiales deberán dejarlo pasar.

    Por el contrario, la izquierda apunta a generar movilización y medidas de lucha con todos los sectores que ya tomaron consciencia del ataque que significan estas disposiciones del Gobierno y de esta manera ir peleando por ganarse para esta posición al resto de los trabajadores de todavía apoyan a Milei.

    El fondo de la discusión se central en si el objetivo es evitar o no que estas medidas se apliquen o, por el contrario, capitalizar electoralmente el descontento que generarán. Independientemente de lo penoso que sería para la clase trabajadora que el DNU quede vigente, también se corre el riesgo de que una mayoría social sea convencida de que no hay otra alternativa y que “es necesario sufrir”.

    Es necesario recordar que luego de los múltiples ajustes del Gobierno de Macri, se fue con un nada despreciable 41% de los votos y Bolsonaro en Brasil, luego de una gestión desastrosa, tuvo una elección muy pareja con Lula Da Silva y su espacio, El Partido Liberal, fue el más votado de Brasil y el que más gobernaciones ganó. Esto evidencia que las personas no solamente votan “con el bolsillo”, hay elementos ideológicos que la derecha empieza a instalar entre los diferentes sectores sociales.

    La convocatoria y preparación de un paro general, podría ser una oportunidad inmensa para poder empezar a ganarse a una mayoría de los trabajadores para la oposición al DNU y al gobierno de Milei.

    Para esto, todos las organizaciones gremiales, movimientos sociales, partidos políticos y trabajadores que quieran frenar el DNU de Milei, deben impulsar la movilización del miércoles 27, que resulta un paso fundamental para esta tarea.

     

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