La propuesta de esta semana fue desarmar las principales líneas discursivas del oficialismo que corre tras la reelección. La selección no es extensiva, pero si creo que es representativa de las principales identidades que disputan un lugar en la interna. Como la vez pasada, esto es un ejercicio de ingeniera inversa, tratando de entender los mensajes que se mandan de forma subepidérmica aunque usen la misma música genérica de fondo.
Derecho al Futuro
El spot con el que quiero arrancar es el de la provincia de Buenos Aires. Digo de la provincia de Buenos Aires porque Axel Kicillof, gobernador que va por la reelección (y figura K más importante en una boleta acutalmente) aparece tres veces, brevemente. Ni siquiera aparece su nombre en ninguna parte del spot. Y no digo que sea casualidad ni sea justo este spot. En las calles de la provincia de Buenos Aires hay carteles callejeros gigantes rosa y turquesa con la consigna “Derecho al futuro”. Un mes antes de las PASO, cuando absoultamente todo esta empapelado con caras de candidatxs, te hace sospechar que justamente esa es la campaña.
Kicillof es el político oficialista de proyección nacional con mayor imagen positiva. Capaz no por éxito propio sino más bien porque los medios opositores no encontraron con qué golpearlo 24/7 como a otras figuras del gobierno. Entendiblemente, lxs bonaerenses no comen vidrio y ven, a grandes rasgos, que posiblemente nada de lo que empeoro estos últimos cuatro años y sea achacable al gobernador no pueda ser reprochado en aún mayor medida al gobierno nacional.
La imagen del gobernador esta reservada para propagandas dirigidas de forma individual, pero eso ya es motivo de otras columnas.
La consigna Derecho al futuro tiene un doble significado que encapsula dos ideas clásicas del kirchnerismo. Una es la lectura de que la Provincia esta yendo hacía un mañana más brillante, usando una retorica de progreso. La otra es que vos, votante, tenes derecho (inalienable) a tener futuro. Esta es otra bandera que el kirchnerismo y el peronismo historicamente se han querido apropiar en distintos momentos, la de los derechos conquistados.
Trabajo, producción, educación, vivienda, protección, consumo, turismo, rutas, acceso a la salud, el spot es un rápido repaso por la gestión de Kicillof sin apenas mostrar al gobernador. Buscan resaltar la imagen de Estado grande y proveedor que muchos podemos recordar de la epica de años dorados kirchneristas, cuando Tecnopolis podía ser un Anti-Disney de la Patria Grande. En definitiva la campaña es de una epica kirchnerista clásica con un foco bien grande en lo bueno que es para tu vida que ellos controlen el Estado.
La Patria sos vos
Acá nos encontramos con una lógica muy diferente de mensaje. Lo que se nos muestra constantemente es a una persona trabajando con la sobreimposición de PATRIA adelante. El slogan que se nos presenta es La patria sos vos. En el spot anterior el foco estaba puesto en las bondades para la vida que traía la presencia del Estado, el control centralizado de los asuntos de la sociedad. Era palpable el historico slogan La patria es el otro.
Acá vemos un paso directo del trabajo individual al concepto de Patria. Es curiosa la ausencia de la linea estatista en un spot peronista con la firma del kirchnerismo organico. No es algo que se diga directamente, pero empezar a correr el foco puede preparar el terreno para otras posturas. Es posible que estén tomando carrera para ideas como que el Estado es enorme e ineficiente y, que requiere un recorte. Después de todo, se sienten notas de menemismo en el aire. Obviamente no es eso lo que esta diciendo directamente, pero si requiere una mención la ausencia.
Este es un spot más centrado, capaz menos termo, apuntando a armar una imagen de Massa que pueda convencer votos por fuera del núcleo ya convencido, de un candidato más ubicuo. Incluso votos centristas que podrían llegar a ir a Larreta. Entra más en sintonía con la experiencia individual de levantarse todos los días a trabajar (marinar con “que tas haciendo patria”, 2015) que en la construcción colectiva. Massa integra una formula que puede resultar competitiva, pero ningún voto le sobra.
Seamos fieles a nuestra historia
Primero vamos a hablar de la ubicación. Parece estar grabado en zonas que, desde la lógica Patria Grande, se suelen relacionar con “lo popular”. Grabois esta en un barrio con calles de tierra, casas de chapa y ladrillos a la vista. Hay una toma en un edificio al lado de una autopista que sospecho es una villa (no soy porteño así que perdón si le erro). Hay una huerta y un camino de tierra que resuenan más al noroeste argentino. Una bandera argentina ondeando en un mastil hecho directamente con el tronco de un arbol en un paisaje que parece un pueblo patagonico.
Nadie va a negar que son lugares donde una gran parte de la clase trabajadora vive. No creo que Grabois este contratando asesores de campaña, pero acotaría que muchxs trabajadores pobres o de la economía popular viven en calles asfaltadas, o en casas de material. Este foco excesivo puede llegar a alejar de su campaña a muchas personas de sectores populares que podrían llegar a simpatizar con su propuesta.
Todo esto mechado con las gestas heroicas que Grabois va nombrando. El spot arma en simultaneo dos narrativas diferentes, con dos mensajes diferentes, que dependen de quién lo este viendo. El primer mensaje es un poco el más obvio, para cualquier votante no muy metido en la rosca. El mensaje de la épica, de las tareas difíciles, que parecen imposibles, pero resultan exitosos. Abre la enumeración con el cruce de los Andes, gesta que nadie puede objetar. El mensaje sería “sé que parece imposible vivir mejor, pero lo podemos lograr, ya lo hicimos muchas veces antes”. Esa sería la primera interpretación de seamos fieles a nuestra historia, mensaje de campaña esperanzador genérico que tranquilamente Larreta podría usar (y usa).
El segundo mensaje es más puntual, y parece el mensaje real que esta queriendo transmitir. La misma épica puede ser leída en términos de David y Goliath. Un correntino contra Inglaterra, un argentino contra Estados Unidos, una pareja santacruceña contra el FMI. Y si pensamos que estamos de cara a las PASO, y no a las generales, ¿quién es David y quién es Goliath? Es un mensaje al votante peronista indeciso, que no sabe si votar a Grabois es algo que sirva para algo más que para sacarse la bronca antes de votar a Massa en las generales. Vamos a dar esta pelea aunque parezca imposible porque esa es nuestra historia. En ese mismo movimiento, Grabois toma la historia progresista del peronismo, y del kirchnerismo. Asevera que esta lista es la verdadera heredera, no la de Massa.
Tres spots, un solo candidato
Algo que resulta obvio y ni hace aclarar es que hay un solo candidato del oficialismo. Kicillof intenta resguardar defensivamente un bastión kirchnerista que es Buenos Aires. Grabois intenta resguardar el flanco izquierdo mientras la cabeza del movimiento lo ningunea. El eje directivo es que el Ministro de Economía, en estos momentos, esta cerrando un acuerdo con el FMI que va a implicar una devaluación del peso. Una devaluación de los salarios de lxs trabajadores. Ni siquiera Grabois intenta negarlo, explícitamente dice que su plan es pagarle al Fondo Monetario Internacional. Al final, todos los discursos conducen al Fondo.