Luego de 50 años, el pasado 28 de agosto, la Corte suprema de Chile determinó la detención de siete exmilitares del ejercito acusados del secuestro, tortura y asesinato de uno de los máximos referentes de la música latinoamericana, Víctor Jara.
El 11 de septiembre de 1973 el dictador y militar, Augusto Pinochet, realizó un golpe de Estado contra Salvador Allende, quien era el presidente electo democráticamente desde noviembre de 1970. Durante la dictadura de Pinochet, que se desarrollo en el extenso periodo de 1973 a 1990, más de 28mil personas fueron torturadas, 3.227 fueron asesinadas y unas 200.000 fueron obligadas al exilio.
En aquellos días, Víctor, era profesor de la Universidad Técnica del Estado donde fue detenido junto a otros profesores y alumnos. Lo llevaron al Estadio de Chile, que había sido convertido en un campo de concentración, donde fue torturado y asesinado junto a Littré Quiroga, quien era el director del Servicio Nacional de Prisiones en el gobierno de Allende. Actualmente, se nombró al lugar como el Estadio Víctor Jara y se colocó una placa en su honor con su último poema.
El manto de impunidad que cubre aquellos crímenes de lesa humanidad poco a poco empieza a correrse, gracias a la implacable lucha que sostienen, hace varias décadas, abogados, familiares y el conjunto del pueblo chileno.
Luego de 50 años, el pasado 28 de agosto, la Corte Suprema de Chile finalmente avanzó con el enjuiciamiento y condena a la autores del secuestro, tortura y homicidio de Víctor y Littré. De acuerdo con el fallo, que fue unánime, fueron condenados los ex militares: Raúl Jofré González, Edwin Dimter Bianchi, Nelson Haase Mazzei, Ernesto Bethke Wulf, Juan Jara Quintana y Hernán Chacón Soto a 25 años de presidio. En paralelo, el exoficial Rolando Melo Silva fue sentenciado a 8 años de cárcel, como encubridor de los homicidios y los secuestros.
En los últimos días, ha trascendido por distintos medios de comunicación, y la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) confirma que, uno de los siete condenados, Hernán Chacón Soto, de 87 años, momentos antes de su detención, habría ingresado nuevamente a su domicilio y tomado un arma para disparase. Además de este suicidio, salió a la luz otra noticia. Esta vez se trata de los exoficiales Raúl Jofré González y Nelson Haase Mazzei, quienes huyeron tras publicarse la condena.
“Canto que ha sido valiente, siempre será canción nueva”
Víctor Jara fue un cantautor comprometido con la realidad y las emociones del pueblo trabajador. Gracias este compromiso con las causas de los explotados y oprimidos, es y será recordado como un referente de la música que nos dejó canciones y poesías que aún recorren las calles de Latinoamérica.
Desde temprana edad se sumó al Partido Comunista de Chile. Fue un destacado militante y miembro del Comité Central de la Juventud del PCC. Estando preso y hasta sus últimos minutos, Víctor, no dejó de escribir. En una de las estrofas de su último poema “Somos cinco mil”, dice:
¡Qué espanto causa el rostro del fascismo! Llevan a cabo sus planes con precisión artera sin importarles nada. La sangre para ellos son medallas; la matanza es acto de heroísmo.
A modo de homenaje, expresamos que Víctor Jara era el referente y la voz de una generación, un artista revolucionario para quien la cultura era un arma para la transformación social. Dicha reivindicación perdería sentido si no siguiéramos su lucha por un futuro sin opresión ni explotación y contra la impunidad de ayer y de hoy.
Hacemos nuestras las palabras que Víctor usó en su momento para reivindicar la lucha del pueblo vientnamita:
Nuestra canción es fuego de puro amor / Es palomo palomar / Olivo del olivar
Es el canto universal / Cadena que hará triunfar / El derecho de vivir en paz
